divendres, 23 de desembre del 2011

La meva vida

Vaig néixer a Viladecans, a casa dels meus avis. La meva mare em cuidava. Però també havia de fer totes les feines de la casa. Vivíem amb els meus avis i tiets, que eren solters.
El meu avi i els meus tiets anaven al camp tot el dia juntament amb el meu pare, que era el més gran dels germans. La meva àvia anava a vendre. Per tant, a ma mare li tocava fer de criada per a tots ells: rentar, planxar, cuinar, fer la neteja, donar menjar al bestiar, triar las verdures, etc. No li quedava temps per a ella.
Quan jo tenia set anys, vam anar a viure a Barcelona. El meu pare feia de taxista i la mare treballava en una porteria.Vaig tenir el meu germà amb nou anys, i jo el cuidava mentre ma mare treballava... 

dijous, 22 de desembre del 2011

El curso que cambió mi vida

Yo escribo una experiencia única. Estando en paro, decidí apuntarme a un curso de hostelería en el Gremi d’Hosteleria de Castelldefels en el año 2008. Este curso se realizaba todas las tardes de lunes a viernes. Esto implicaba que, al vivir en Gavà, tenía que desplazarme cada día en autobús hasta Castelldefels. Pero, un buen día, en el rato de descanso que teníamos cada tarde, estaba hablando con una de mis compañeras de clase y ella me comentó que venía siempre en coche...
Pryindia

dimecres, 21 de desembre del 2011

Fibromialgia y familia

Un paso muy importante es la aceptación de la fibromialgia. Es clave que los familiares y la gente de tu entorno estén informados como tú de todo lo que te ocurre y te puede ocurrir, y de cómo ayudarte para sentirte mejor. Es importante que tú entiendas que, para ellos, tampoco es una tarea fácil convivir con una fribromiálgica: porque ellos también pueden sentirse impotentes ante esta enfermedad, sobre todo cuando son conscientes del sufrimiento y no saben qué pueden hacer para aliviarlo. No saben cómo preguntar a la persona enferma y les entran dudas... 

dimarts, 20 de desembre del 2011

El delta del Llobregat y sus contradicciones

Gavà, la ciudad donde vivo, forma parte parcialmente del delta del Llobregat, un delta que crea el río Llobregat en su desembocadura en el mar Mediterráneo, al sur de Barcelona. Comparte este territorio con: Castelldefels, Viladecans, Sant Boi, Cornellà, L’Hospitalet, Barcelona y El Prat, que está situada totalmente dentro del delta, concretamente en la desembocadura del río.
El delta tiene una superficie aproximada de 95 a 100 km. cuadrados y una longitud de costa de 23 km, desde El Prat hasta Les Botigues de Sitges, donde el Garraf cierra el delta.
Los sistemas deltaicos constituyen una estructura a la que van a parar los sedimentos del río, además de los aportes marinos. Son territorios muy ricos en flora y fauna. Hoy sabemos que estos ecosistemas son muy valiosos para el medio ambiente y que están estrechamente ligados al nacimiento de la vida en el planeta...

dilluns, 19 de desembre del 2011

Sabías que...

En lo que va de año, 54 mujeres perdieron la vida en manos de sus parejas. Me temo que, antes que termine 2011, la cifra habrá aumentado. Es un dato escalofriante que, después de muchos años denunciando las mujeres las desigualdades por razones de género y luchando por defender nuestros derechos, no seamos capaces de proteger sus vidas. Es muy dura esta conclusión pero no por ello menos real.
La lucha de las mujeres desde tiempo muy remoto ha pasado por etapas muy diferentes, pero en la actualidad es igualmente necesaria, a pesar de los logros conseguidos. Nuestras madres y abuelas vivían casi en el anonimato como personas. Sus vidas transcurrían al cuidado de toda la familia, asumiendo grandes tareas en el hogar. Con su esfuerzo, colaboraban en el sustento y la economía de la familia, realizando un trabajo invisible pero realmente imprescindible. Su poder de decisión era nulo. No tenían ni derecho a voto, ni oportunidad de recibir una formación: esto era cosa de hombres...
Margarita

dissabte, 17 de desembre del 2011

La señora María: “¡Ay, ay, ay!”. "Pues guarda para cuando no hay"

No recuerdo qué número de ingreso fue, pero creo que debía de llevar unos cuantos, porque cuando llegué a la habitación sentí una sensación de alivio al ver que mi nueva compañera era la señora María, una señora muy mayor y muy malita. Esto no significa que me guste que las personas mayores estén muy enfermas, sino que, teniendo en cuenta el tiempo que supuestamente iba a pasar allí, las señoras mayores y muy malitas son la mejor opción como compañeras, porque no molestan y no les molestas.
Recuerdo a la señora María como una mujer delgada, con el pelo blanco. Debía de tener casi unos noventa años y problemas de salud relacionados con la edad, algo de la sangre. Parece ser que la sangre no le coagulaba bien y tenía una herida en la pierna que le dolía mucho. Casi ni hablaba, ni comía, ni se movía de la cama. Sus hijos venían cada día para darle de comer y hacerle compañía. Tenía una hija que vivía en Portugal (me regaló un rosario de la virgen de Fátima y siempre lo he llevado conmigo)...
Mariola

divendres, 16 de desembre del 2011

Recuerdos de mi infancia

Ahora que ya tengo tantos años y buceo en los recuerdos de mi vida, veo que los más bonitos que tengo son de mi infancia.
Antes de los seis años son pocos y difusos. A partir de esa edad, que fue cuando nació el más pequeño de mis tres hermanos, me acuerdo de muchas cosas.
De mi pueblo, en Extremadura, donde nací recuerdo que los inviernos eran muy fríos. Mi padre era el primero que se levantaba y, antes de irse a trabajar al campo, hacía la candela de leña, en el suelo, encima de la piedra de molino que había. A su alrededor todo eran baldosas pintadas con pintura roja, y allí no se podía hacer porque se hubiera quemado la cerámica. Hacía las migas en una sartén muy grande. Cuando estaban listas, mi madre y todos los pequeños nos sentábamos en sillas bajas alrededor del fuego y allí comíamos...